Recomendación: Michel Moore

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Michel Moore, está realizando, a través de sus documentales, una importantísima y valiente labor en un mundo periodístico que presume de libertad e imparcialidad informativa, pero donde lo que realmente prima son los intereses políticos y económicos, lo que genera una manipulación enorme.

Muy pocos se atreven a decir las cosas como realmente son, y mucho menos desafiar abiertamente a los círculos de poder. El Sr. Moore es con diferencia el abanderado de esos escasos valientes y comprometidos personajes, que rebuscan la verdad dentro de tanta hipocresía. El intento que está haciendo de abrir los ojos a la gente para que se vaya creando una conciencia menos ingenua y más crítica en la sociedad, es en mi opinión el único camino que nos puede permitir en el futuro acabar con esos círculos selectos económicos y políticos que siendo una minoría dominan el mundo a su antojo aprovechándose de la mayoría.

Recomiendo a todo el mundo que vea los documentales del Sr. Moore. Sus películas han sido premiadas en el festival de Cannes y en los Oscar, y tienen asegurado que no se van a aburrir ya que todo está contado de una forma amena, y sobre todo, les van a mostrar la verdadera cara de muchos de los personajes e instituciones que rigen el mundo.

Creo que estamos tan derrotados sicológicamente que consideramos normales un montón de situaciones que solo son normales porque siempre las hemos visto así, pero ni mucho menos porque sean lógicas o justas.

-          No es normal que te pidan sacrificios la gente que no está dispuesta a hacerlo ellos, igual me da que sea un político, que un empresario, que te lo pidan para cobrar menos o para ir a la guerra.

-          No es normal que un ministro no tenga ni idea del sector que representa, y que pueda cambiar de ministerio de hoy a mañana. No es normal que un político pueda tener dos,tres o más cargos a la vez, cuando cualquier trabajador con uno solo, a veces no llega a tiempo. 

-          Por supuesto menos normal todavía es que cobre por todos los cargos como si los ejerciera a pleno rendimiento. La misma anormalidad y millonariamente remunerada encontraremos en la empresa privada cuando hablamos de consejeros o miembros directivos que pueden tener remuneraciones de uno solo de ellos, equivalentes al salario de 1.000 trabajadores de la misma empresa.

-          No es normal que los culpables de una situación tan grave como es esta crisis económica sean los que han recibido las ayudas de los gobiernos, mientras que las victimas no solo tienen que sufrir las consecuencias, sino que además son los que van a financiar esas ayudas, y tienen que soportar todo tipo de recortes en sus condiciones futuras para asegurar que esos culpables puedan seguir disfrutando los mismos privilegios que tenían y en el futuro puedan volver a cometer los mismos excesos.

-          No es normal que un gobierno financie unos partidos políticos que son los que van a estar en ese gobierno, lo que provoca, no solo la impunidad para distribuirse el dinero a su antojo, sino situaciones tan curiosas como que sus miembros puedan cobrar por sus cargos políticos, y a la vez por sus cargos de partido que evidentemente se pagan del mismo sitio.

Tenemos que escuchar los mensajes y explicaciones que nos exponen gente como el Sr. Moore, además de esforzarnos nosotros mismos por no dejarnos manipular, porque solo manteniendo independiente nuestra capacidad de razonar podremos llegar a las conclusiones que nosotros consideremos que merecen nuestro apoyo o nuestro rechazo. 

Creo que es muy difícil que podamos cambiar algo en una sociedad donde los sectores que más se benefician son los que tienen el poder y los medios para evitar que cualquier oposición les pueda perjudicar, pero si conseguimos no dejarnos engañar, ya habremos empezado a cambiar cosas, de hecho, hay que tener en cuenta que todas las estrategias políticas e informativas que nos hacen llegar a la gente ‘de calle’, están diseñadas teniendo en cuenta la facilidad de engaño que pueden ejercer sobre nosotros. Aunque no moviéramos un dedo, solo con que se dieran cuenta de que ya no nos podían engañar, inevitablemente se verían obligados a cambiar sus estrategias, y quien sabe, a lo mejor en el futuro la mejor forma de llegar a la gente sería decir la verdad.