UN PAÍS MUY LÓGICO
Es prioridad de este gobierno aforar a la monarquía,
aunque haya que modificar esas leyes a las que tanto respeto exigen. Es
algo muy lógico según los miembros del gobierno, ya que hay otros casi
10.000 cargos públicos que ya cuentan con ese aforamiento, algo también
muy lógico en un país donde la justicia es igual para todos.
Como son
lógicos, algunos indultos increíbles, o cambiar y molestar a los jueces
que no interesan, o que los fiscales recurran en defensa de los
acusados, o que las corrupciónes e irresponsabilidades en los círculos
de poder queden impunes.
Vivimos en un país en el que lo lógico es que los que más
tienen paguen menos, en el que los cargos que menos trabajan son los
que más cobran, en el que los culpables de la crisis sean los que
reciban ayudas mientras las victimas pierden las que ya tenían, en el
que los que dicen representarte ni te preguntan ni te escuchan.
La lógica de nuestros dirigentes les impide dimitir, o
renunciar a parte alguna de sus remuneraciones, y por supuesto, no
contempla que se diga que en España hay millones de niños en riesgo
de pasar hambre, ni que las oenegés que los alimentan puedan hacer
críticas públicas a unos gobernantes tan sensibles con la información
como despreocupados con los hechos.
Un país donde es lógico y consentido el abuso de poder y
la injusticia social, que centra sus prioridades en mantener los
privilegios de la clase dirigente en vez de solucionar las necesidades
de los más débiles, es un país socialmente enfermo que no tiene ningún
futuro.
José Luis Requelme Arnedo
José Luis Requelme Arnedo